
Las empresas de logística “compiten” por tener uno de los preciados espacios industriales al centro de la Ciudad de México, que son escasos. Las construcciones tienen tres particularidades: son pequeños, más caros que en el resto del Valle de México y tienen posiciones privilegiadas para reducir costos de envío en las metrópolis.
“Cada inquilino elige su ubicación de acuerdo con su operaciones y oferta disponible; en los últimos trimestres, hemos observado un nuevo apetito por naves industriales en el radio de 0 a 15 km para seguir con las tendencias de crecimiento en las industrias del e-commerce, así como de transporte y logística”, explica la consultora SiiLA.